Fernando Iwasaki

Fernando Iwasaki

Esposa de Antonio Machado

Esposa de Antonio Machado

El Romanticismo

El Romanticismo

viernes, 29 de enero de 2010

Características del marxismo en el Realismo:
El realismo socialista tiene sus raíces en el neoclacisismo y las tradiciones realistas de la literatura rusa del siglo XIX, que describe la vida simple del pueblo, de lo cual es un exponente la obra de Máximo Gorki.
Sostiene que el verdadero arte es el que describe y exalta la lucha del proletariado hacia el progreso socialista. El estatuto de la Unión de Escritores Soviéticos de 1934 sostenía que el realismo socialista era el método básico de la literatura y la crítica literaria soviéticas; exigía del escritor veracidad y una representación concreta de la realidad en su desarrollo revolucionario. La concreción y veracidad histórica de la representación artística de la realidad debe estar vinculada con la tarea de transformación ideológica y educacional de los trabajadores en el espíritu del socialismo.
Su objetivo es exaltar al trabajador común, sea industrial o agrícola, al presentar su vida, trabajo y recreación como algo admirable. En otras palabras, su objetivo es educar al pueblo en las miras y significado del socialismo. La meta final es crear lo que Lenin llamó un tipo de ser humano completamente nuevo, el Nuevo Hombre Soviético. Stalin describió a los ejecutores del realismo socialista como ingenieros de almas.
Inventos en el Realismo y Naturalismo:
•Historia, cultura y sociedad
•La Cultura:
En la segunda mitad del s. XIX aún hay en España muchísimos analfabetos y la situación cultural es bastante similar a la de la primera mitad. El problema de la secularización de la enseñanza dividirá a los intelectuales e incluso llegará a ser prioritario durante la República, pero seguía sin resolverse al final de siglo.
En los últimos 20 años del siglo la mitad de las novelas publicadas son traducciones del francés. Las obras de los autores españoles de éxito, como Galdós, sólo son compradas por unas 7000 personas.
Los periódicos se decantan cada vez más hacia la información. El escritor de la segunda mitad del siglo sigue siendo periodista, pero también filósofo y hombre de acción. Tiene reconocimiento social y, aunque pluriempleado, se gana la vida. El problema económico afecta sobre todo a los maestros de la enseñanza pública, poco reconocidos y peor pagados. De ahí el dicho: “pasar más hambre que un maestro de escuela”.
•Movimientos ideológicos:
En el Realismo y en el Naturalismo influyen una serie de doctrinas filosóficas de origen extranjero.
-El krausismo. Procede de Alemania. Propugna la tolerancia hacia todas las ideas y la libertad de pensamiento. Gracias al “libre examen” el hombre, mediante la razón, puede elegir entre el bien y el mal.
A partir de las ideas krausistas, Giner de los Ríos funda, en 1876, La Institución Libre de Enseñanza. Pretende educar a los futuros dirigentes del país para que sean capaces de transformarlo. Su influencia se extenderá hasta bien entrado el s. XX.
-El positivismo de Auguste Comte. No valora lo que no puede ser objeto de experiencia. Tiene carácter pragmático, se basa en lo concreto y en lo inmediato y apoya el progreso.
-El utilitarismo de Benthan y Stuart Mill. “Una idea es útil porque es verdadera y es verdadera porque es útil. Las acciones son buenas en razón de su tendencia a producir el bienestar y malas en razón de su tendencia a producir el malestar”. Todo se juzga en función de su utilidad.
-El pensamiento socialista de Marx y Engels. Todo cuanto existe procede únicamente de la evolución dialéctica de la materia, incluso la mente humana.
-El Determinismo y el experimentalismo de Bernard. Niega la libertad humana, por tanto el hombre actúa impulsado por su herencia biológica y las presiones sociales.
-El pensamiento católico. Reacciona frente al positivismo y defiende los valores del espíritu, los dogmas de la iglesia y la moral cristiana.
-El evolucionismo de Darwin. Niega la intervención divina en la creación del hombre con lo que también, niega su espiritualidad.
•El Realismo español:
La aparición del realismo español hay que vincularla, tanto por la cronología como por la ideología, a la revolución burguesa de 1868. algunos críticos agrupan los autores realistas bajo el nombre de “Generación del 68”.
En la tradición realista de toda la literatura española está influenciada por autores extranjeros, sobre todo rusos y franceses.
-Honore de Balzac, autor francés. “La Comedia humana”
-Emilie Zola, autor francés. “Germinal”
-Fedor Dostoievski, autor ruso. “Los hermanos Karamazov” y “Crimen y Castigo”
-Charles Dickens, autor británico. “Oliver Twist”, “David Copperfield”, “Tiempos difíciles” e “Historia de dos ciudades”
•Temas:
Los temas que se tratan son: asuntos cotidianos y de compromiso social: la vida de la burguesía urbana, la vida en el campo, la política, el caciquismo social, el trabajo en la fábrica, etc.
•Características:
Refleja lo que encuentra tal como lo ve, sin juzgarlo. Tienen un afán de objetividad: las acciones y palabras de un personaje lo irán dando a conocer al lector.
Muestran la oposición campo-ciudad. En el campo la vida es idílica, mientras que en la ciudad es un nido de pasiones e insatisfacciones.
•Lengua:
Utilizan un lenguaje coloquial, voces populares e incluso de jergas. También términos cultos procedentes de: la medicina, la filosofía, los inventos técnicos, la política, etc
Palabras de la RAE:
Diafásico, ca:
1. adj. Ling. Se dice de los fenómenos de habla debidos a los diferentes registros lingüísticos.
2. adj. Ling. Perteneciente o relativo a estos fenómenos.
Diastrático, ca:
1. adj. Ling. Se dice de los fenómenos lingüísticos relacionados con el nivel sociocultural de los hablantes.
2. adj. Ling. Perteneciente o relativo a estos fenómenos.
Diatópico, ca:
1. adj. Ling. Se dice de los fenómenos que se producen en una lengua en virtud de su extensión geográfica.
2. adj. Ling. Perteneciente o relativo a estos fenómenos.

jueves, 14 de enero de 2010

EL ADULTERIO:
-AUTORES:
Gustave Flaubert era el segundo hijo de Achille Cléophas (1784-1846) y de Anne Justine, de soltera Fleuriot (1793-1872). El padre de Flaubert, cirujano jefe del Hospital de Ruán, sirvió como modelo para el personaje del doctor Lariviere en Madame Bovary. Su madre estaba emparentada con algunas de las más antiguas familias de Normandía.
El 15 de mayo de 1832 ingresó en el Colegio Real de Ruán, donde cursó octavo curso. Siguió sus estudios en el colegio y el instituto de Ruán sin demasiado entusiasmo. En el colegio era considerado un vago; sin embargo se inició en la literatura a la edad de once años. Durante el verano de 1836 conoció a Élisa Schlésinger en Trouville. Este encuentro lo marcó bastante, cosa que reflejó posteriormente en su novela La educación sentimental.Licenciado en 1839, en agosto de 1840 superó el examen de baccalauréat (selectividad). En el sorteo para el servicio militar resultó exento, e inició entonces sin demasiada convicción los estudios de Derecho en París. En su juventud Flaubert estaba lleno de vigor y, a pesar de su timidez, poseía una cierta gracia, era muy entusiasta e individualista y aparentemente no tenía ninguna ambición. Conoció a Víctor Hugo y a finales de 1840 viajó con él por los Pirineos y Córcega. De vuelta a París perdía el tiempo soñando despierto, viviendo de las rentas que le proporcionaba su patrimonio. En junio de 1844, Flaubert, que amaba el campo y detestaba la ciudad, dejó los estudios de Derecho y abandonó París para regresar a Croisset, cerca de Ruán, donde vivió con su madre. Esta propiedad, una casa en una agradable parcela a orillas del Sena, fue el hogar de Flaubert hasta el final de sus días. Aquí es también donde comenzó sus primeros trabajos literarios (Noticias - primera versión de La educación sentimental).
-Obras

Flaubert fue contemporáneo de Baudelaire, y como él, ocupa una posición clave en la literatura del siglo XIX. En su época rechazado (por razones morales) y admirado (por su fuerza literaria) al mismo tiempo, en la actualidad es considerado como uno de los mayores novelistas de su siglo, destacando sus obras Madame Bovary y La educación sentimental. Flaubert se sitúa entre la generación romántica y la generación realista (Stendhal, Balzac) y la generación naturalista (Zola, Maupassant. Este último consideraba a Flaubert su maestro). Su vasta correspondencia con Louise Colet, George Sand y otros muchos es igualmente de un gran interés humano y literario.
Modernismo
Movimiento de ruptura con la estética vigente que se inicia en torno a 1880 y cuyo desarrollo fundamental alcanza hasta la Primera Guerra Mundial. Tal ruptura se enlaza con la amplia crisis espiritual de fin de siglo.
Las principales características:

-El rechazo de la realidad cotidiana, ante la cual el escritor puede huir en el tiempo (evocando épocas pasadas y mejores) o en el espacio (muchos de los poemas se desarrollan en lugares exóticos y lejanos).
-Una actitud aristocratizante y cierto preciosismo en el estilo, así como la búsqueda de la perfección formal (de inspiración parnasiana) que se aprecia no sin cierto individualismo.
-La búsqueda de la belleza se consigue a través de imágenes muy plásticas y acercamiento a las artes, de una adjetivación con predominio del color y con imágenes relacionadas a todos los sentidos, así como con la musicalidad que produce el abuso de la aliteración, los ritmos marcados y la utilización de la sinestesia (influencias del simbolismo).
-Tanto la fidelidad a las grandes estrofas clásicas como las variaciones sobre los moldes métricos, utilizando versos medievales como el alejandrino, el dodecasílabo y el eneasílabo; con aportes de nuevas variantes al soneto.
-El uso de la mitología y el sensualismo.
-Una renovación léxica con el uso de helenismos, cultismos y galicismos, que no buscaba tanto la precisión como el prestigio o la rareza del vocablo.
-El deseo innovador que aspiraba a la perfección que apreciaban en la literatura europea.
-La adaptación de la métrica castellana a la latina.
-El culto a la perfección formal, con poesía serena y equilibrada.
Temas del modernismo
-La desazón típica del romanticismo: el hastío de la vida y una profunda tristeza, junto a la melancolía y la angustia.

-Búsqueda de la soledad y rechazo de una sociedad.
-El escapismo, evasión de la realidad del tiempo y del espacio.
-El amor y el erotismo, con cierta idealización del amor y de la mujer. El tema del amor imposible se presenta con diferencias respecto al ideal romántico. Hay un contraste entre el profundo y delicado amor y un intenso erotismo.
-El cosmopolitismo muestra el anhelo de distinto y aristocrático. Los modernistas demostraban mucha devoción por París.
-Los temas americanos, en especial los temas indígenas, muchas veces con una defensa del indígena.
-Lo hispano como antecedente histórico valioso que otorga una armonía frente al mundo inarmónico.
Juan Ramón Jiménez
Aunque por edad pertenece a la segunda generación, tiene una estrecha relación con las dos que la rodean. Se sumó al modernismo, siendo maestro de muchos de los autores vanguardistas.Busca conocer la verdad y de esta manera alcanzar la eternidad. La exactitud para él, es la belleza. La poesía es una fuente de conocimiento, para captar las cosas.Juan Ramón Jiménez tiene una poesía panteística, exacta y precisa. Su poesía evoluciona de forma que se distinguen dos épocas. La primera acaba al iniciarse la segunda en 1916. Escribió el «Diario de un poeta recién casado» en el que cuenta su luna de miel en EEUU.
Etapas de su obra:

La etapa sensitiva (1898–1915)

Esta etapa se subdivide a su vez en dos sub-etapas; la primera abarca hasta 1908; la segunda, hasta 1916. La primera está marcada por la influencia de Bécquer, el Simbolismo y un Modernismo de formas tenues, rima asonante, verso de arte menor y música íntima. En ella predominan las descripciones del paisaje como reflejo del alma del poeta, un paisaje que no es natural ni fruto de paseos como el de Machado, sino sometido al estatismo de un jardín interior, al intimismo de un orden.
La etapa intelectual (1916–1936)

Su primer viaje a América y el contacto con la poesía en inglés (Yeats, William Blake, Emily Dickinson, Shelley) marca profundamente esta segunda etapa (1916–1936), bautizada por él mismo como Época intelectual y que le vincula a la corriente literaria del Novecentismo. Se produce un hecho fundamental: el descubrimiento del mar como motivo trascendente. El mar simboliza la vida, la soledad, el gozo, el eterno tiempo presente. Se inicia asimismo una evolución espiritual que lo lleva a buscar la trascendencia.
La etapa suficiente o verdadera (1937–1958)

Pertenece a la época suficiente o verdadera todo lo escrito durante su exilio americano. Juan Ramón continúa replegado en sí mismo en busca de la belleza y la perfección, aunque no tanto como para no preparar un amplio libro en favor de la República española, Guerra en España, que nunca pudo ver publicado.[1] Su ansia por la trascendencia lo lleva a una cierta mística e identificarse con Dios y la belleza en uno. Su lengua poética se transforma en una especie de idiolecto poblado de múltiples neologismos (ultratierra, deseante...). Tras un período de relativo silencio, publica Animal de fondo (1949), Tercera antología poética (1957), En el otro costado (1936–42) y Dios deseado y deseante (1948–49).
El realismo
 Se halla inscrito dentro de un movimiento más amplio que afecta también a las artes plásticas, al cine (Neorrealismo), a la fotografía (que surge con él en el siglo XIX), y a la filosofía de la ciencia (Popper y Mario Bunge). Las obras realistas pretenden testimoniar documentalmente la sociedad de la época y los ambientes más cercanos al escritor, en oposición a la estética del Romanticismo, que se complacía en ambientaciones exóticas y personajes poco corrientes y extravagantes. La estética del Realismo, fascinada por los avances de la ciencia, intenta hacer de la literatura un documento que nos pueda servir de testimonio sobre la sociedad de su época, a la manera de la recién nacida fotografía. Por ello describe todo lo cotidiano y típico y prefiere los personajes vulgares y corrientes, de los que toma buena nota a través de cuadernos de observación, a los personajes extravagantes o insólitos típicos del anterior Romanticismo. Esta estética propugna a su vez una ética, una moral fundamentada en la moderación y síntesis de cualquier contradicción, la objetividad y el materialismo.En cuanto a los procedimientos literarios del Realismo, son característicos el abuso de la descripción detallada y prolija, enumeraciones y sustantivos concretos; el uso del párrafo largo y complejo provisto de abundante subordinación, la reproducción casi magnetofónica del habla popular, tal cual se pronunciaba y sin corrección alguna que pretenda idealizarla, y el uso de un estilo poco caracterizado, un lenguaje "invisible" que exprese personajes, hechos y situaciones objetivamente sin llamar la atención sobre el escritor.


Antonio Machado
nació el 26 de julio de 1875 en Sevilla. Fue el segundo de cinco hermanos de una familia liberal; el mayor, Manuel, trabajó junto a Antonio en varias obras. Su padre, Antonio Machado Álvarez "Demófilo", amigo de Joaquín Costa y de Francisco Giner de los Ríos, publicó numerosos estudios sobre el folclore andaluz y gallego. Su madre, Ana Ruiz. Su abuelo, Antonio Machado Núñez, era médico y profesor de Ciencias Naturales.En 1883, su abuelo fue nombrado profesor de la Universidad Central de Madrid y toda la familia se traslada con él a dicha ciudad. Antonio Machado completa entonces su formación en la célebre Institución Libre de Enseñanza, fundada por Francisco Giner de los Ríos.En 1889 empieza sus estudios de bachillerato, primero en el instituto San Isidro y después en Cardenal Cisneros. Es en esa época cuando se aficiona al teatro junto a su hermano, y comienza a asistir a tertulias. Machado interrumpe varias veces sus estudios, afectado por los problemas económicos de su familia tras la muerte de su padre por tuberculosis en 1893 y su abuelo, tres años más tarde. El influjo familiar y su centro de estudios marcaron su camino intelectual. Por aquella época, conoce a Valle-Inclán en una tertulia. Trabaja en la parte de los verbos, en el Diccionario de ideas afines.En 1899, Antonio Machado viaja a París, donde vive su hermano el poeta Manuel, con quien en lo sucesivo emprenderá una carrera conjunta de autores dramáticos, y trabaja de traductor para la Editorial Garnier. Allí entrará en contacto con, por ejemplo, Oscar Wilde y Pío Baroja y asiste a las clases del filósofo Henri Bergson, que le impresionan profundamente. Vuelve a España y trabaja de actor mientras alcanza el título de bachiller.En 1902 vuelve a París y conoce a Rubén Darío. De vuelta a Madrid entabla amistad con Juan Ramón Jiménez y publica Soledades (1903).

miércoles, 13 de enero de 2010

Rubén Darío

Félix Rubén García Sarmiento, conocido como Rubén Darío (Metapa, hoy Ciudad Darío, Matagalpa, 18 de enero de 1867 - León, 6 de febrero de 1916), fue un poeta nicaragüense, máximo representante del Modernismo literario en lengua española. Es posiblemente el poeta que ha tenido una mayor y más duradera influencia en la poesía del siglo XX en el ámbito hispánico. Es llamado príncipe de las letras castellanas.Fue el primer hijo del matrimonio formado por Manuel García y Rosa Sarmiento, quienes se habían casado en León el 26 de abril de 1866, tras conseguir las dispensas eclesiásticas necesarias, pues se trataba de primos segundos. Sin embargo, la conducta de Manuel, aficionado en exceso al alcohol y a las prostitutas, hizo que Rosa, ya embarazada, tomara la decisión de abandonar el hogar conyugal y refugiarse en la ciudad de Metapa, en la que dio a luz a su hijo, Félix Rubén. El matrimonio terminaría por reconciliarse, e incluso Rosa llegó a dar a luz a otra hija de Manuel, Cándida Rosa, quien murió a los pocos días. La relación se volvió a deteriorar y Rosa abandonó a su marido para ir a vivir con su hijo en casa de una tía suya, Bernarda Sarmiento, que vivía con su esposo, el coronel Félix Ramírez Madregil, en la misma ciudad de León. Rosa Sarmiento conoció poco después a otro hombre, y estableció con él su residencia en San Marcos de Colón, en el departamento de Choluteca, en Honduras.Aunque según su fe de bautismo el primer apellido de Rubén era García, la familia paterna era conocida desde generaciones por el apellido Darío. El propio Rubén lo explica en su autobiografía:Para la formación poética de Rubén Darío fue determinante la influencia de la poesía francesa. En primer lugar, los románticos, y muy especialmente Víctor Hugo. Más adelante, y con carácter decisivo, llega la influencia de los parnasianos: Théophile Gautier, Catulle Mendès, y José María de Heredia. Y, por último, lo que termina por definir la estética dariana es su admiración por los simbolistas, y entre ellos, por encima de cualquier otro autor, Paul Verlaine.12 Recapitulando su trayectoria poética en el poema inicial de Cantos de vida y esperanza (1905), el propio Darío sintetiza sus principales influencias afirmando que fue "con Hugo fuerte y con Verlaine ambiguo".
Ya en las "Palabras Liminares" de Prosas profanas (1896) había escrito un párrafo que revela la importancia de la cultura francesa en el desarrollo de su obra literaria:
El primer intento por parte de Darío de escribir una novela tuvo lugar a poco de desembarcar en Chile. Junto con Eduardo Poirier, escribió en diez días, en 1887, un folletín romántico titulado Emelina, para su presentación al Certamen Varela, aunque la obra no se alzó con el premio. Más adelante, volvió a probar fortuna con el género novelesco con El hombre de oro, escrita hacia 1897, y ambientada en la Roma antigua.
Ya en la etapa final de su vida, intentó escribir una novela, de marcado carácter autobiográfico, que tampoco llegó a terminar. Apareció por entregas en 1914 en La Nación, y lleva el título de El oro de Mallorca. El protagonista, Benjamín Itaspes, es un trasunto del autor, y en la novela son reconocibles personajes y situaciones reales de la estancia del poeta en Mallorca.Entre el 21 de septiembre y el 30 de noviembre de 1912 publicó en Caras y caretas una serie de artículos autobiográficos, luego recogidos en libro como La vida de Rubén Darío escrita por él mismo (1915).28 También tiene interés para el conocimiento de su obra la Historia de mis libros, aparecida póstumamente, acerca de sus tres libros más importantes (Azul..., Prosas profanas y Cantos de vida y esperanza).El interés de Darío por el relato breve es bastante temprano. Sus primeros cuentos, "Las albóndigas del Rhin" y "Los diamantes del coronel" datan de 1885-1886. Son especialmente destacables los relatos recogidos en Azul..., como "El rey burgués", "El sátiro sordo" o "La muerte de la emperatriz de la China". Continuaría cultivando el género durante sus años argentinos, con títulos como "Las lágrimas del centauro", "La pesadilla de Honorio", "La leyenda de San Martín" o "Thanatophobia".
Artículos periodísticos:
Juan Montalvo, escritor ecuatoriano, quien influyó en la actitud política de Rubén Darío.
El periodismo fue para Darío su principal fuente de sustento. Trabajó para varios periódicos y revistas, en los que escribió un elevadísimo número de artículos, algunos de los cuales fueron luego recopilados en libros, siguiendo criterios cronológicos o temáticos.
Leopoldo Alas, Clarín

Nació el 25 de abril de 1852 en Zamora, donde se había trasladado su familia desde Oviedo, al ser nombrado su padre, Jenaro García Alas, gobernador de la ciudad leonesa Leopoldo fue el tercer hijo del matrimonio.En la casa se hablaba continuamente de Asturias y su madre, con cierta nostalgia, contaba relatos de aquella tierra de sus antepasados. Este ambiente influyó en gran medida en el espíritu del niño Leopoldo que desde siempre se sintió más asturiano que zamorano, aunque a lo largo de su vida conservó un cariño especial por las tierras que lo vieron nacer.A los siete años entró a estudiar en el colegio de los jesuitas ubicado en la ciudad de León en el edificio de San Marcos (actual parador de turismo).[1] Desde el principio supo adaptarse a las normas y a la disciplina del centro de tal manera que a los pocos meses era considerado como un alumno modelo. Sus compañeros lo conocían con el mote (sobrenombre) de «el Gobernador», por alusión a la profesión de su padre. Sus biógrafos aseguran que esta etapa estudiantil engendró en Leopoldo el sentimentalismo religioso y el principio de gran disciplina moral que fueron la base de su carácter. En este primer año escolar ganó una banda azul como premio y trofeo literario. La conservó toda su vida y se encontraba entre los objetos más queridos del museo familiar.En el verano de 1859 toda la familia regresó a Asturias. Leopoldo descubrió con sus propios ojos la geografía asturiana de la que tanto había oído hablar a su madre. Durante los años siguientes Leopoldo se encuentra en libertad por las tierras de Guimarán, propiedad de su padre, donde aprenderá directamente de la Naturaleza y de los libros que encuentra en la vieja biblioteca familiar, donde entra en contacto por primera vez con dos autores que serán sus maestros: Cervantes y Fray Luis de León.
Se trata de uno de los principales representantes de la novela realista del siglo XIX y uno de los más importantes escritores en lengua Biografía.
Benito Pérez Galdós
era el décimo hijo de un coronel del ejército, Sebastián Pérez, y de Dolores Galdós, una dama de fuerte carácter e hija de un antiguo secretario de la Inquisición. Su padre inculcó en el hijo el gusto por las narraciones históricas contándole asiduamente historias de la Guerra de la Independencia, en la que había participado. Su imaginación fue desbordante ya desde muy joven. En 1852 ingresó en el Colegio de San Agustín, que aplicaba una pedagogía activa y bastante avanzada para la época, durante los años en que empezaban a divulgarse por España las polémicas teorías darwinistas, de lo cual hay ecos en obras suyas como, por ejemplo, Doña Perfecta.
Obtuvo Galdós el título de bachiller en Artes en 1862, en el Instituto de La Laguna, y empezó a colaborar en la prensa local con poesías satíricas, ensayos y algunos cuentos. También se había destacado por su interés por el dibujo y la pintura. Después de la llegada de una prima suya a casa, el joven Galdós se trastornó emocionalmente y sus padres decidieron que se fuera a la capital a estudiar la carrera de Derecho.
Llegó a Madrid en septiembre de 1862, se matriculó en la universidad y tuvo por profesores a Fernando de Castro, Francisco de Paula Canalejas, Adolfo Camús y Valeriano Fernández y Francisco (Paco) Chacón. Allí también conoció al fundador de la Institución Libre de Enseñanza, Francisco Giner de los Ríos, que le alentó a escribir y le hizo sentir curiosidad por una filosofía, el krausismo, que marcaría fuertemente su primera novelística. Sin embargo, de momento se limitó a frecuentar los teatros y a crear con otros escritores paisanos suyos (Nicolás Estévanez, José Plácido Sansón, etcétera) la «Tertulia Canaria» en Madrid, mientras acudía a leer al Ateneo a los principales narradores europeos en inglés y francés. Allí, durante una conferencia de Leopoldo Alas «Clarín», traba amistad con el famoso crítico y novelista asturiano.